Tarta de manzana con leche y huevos

Receta ↓ Ángela Solar

Esta tarta de manzana con leche y huevos es una delicia para los sentidos. Su combinación única de ingredientes, como la mantequilla y la canela, crea un sabor y una textura únicos. Además, es una receta sencilla y rápida de hacer, perfecta para aquellos días en los que no tienes mucho tiempo para cocinar.

Ingredientes necesarios

Para preparar esta deliciosa tarta de manzana con leche y huevos, necesitarás reunir los siguientes ingredientes. Por cierto, yo suelo usar mantequilla sin sal para la masa, pero si tienes mantequilla con sal, reduce un poco la cantidad de sal que añadas a la masa. También puedes sustituir la canela por otras especias, como la nuez moscada, si lo prefieres.

• Masa: 200g de harina, 100g de mantequilla sin sal, 50g de azúcar y 1 huevo. Personalmente, me gusta tamizar la harina para obtener una masa más fina y suave.
• Relleno de manzana: 4 manzanas, 50g de azúcar, 1 cucharadita de canela y el zumo de 1 limón. Yo prefiero las manzanas Golden Delicious para este relleno, pero puedes usar la variedad que más te guste.
• Relleno de leche y huevos: 250ml de leche, 2 huevos, 75g de azúcar y 1 cucharadita de extracto de vainilla. Si no tienes extracto de vainilla, puedes usar una vaina de vainilla para aromatizar la leche antes de mezclarla con los huevos y el azúcar.

Pasos previos a la preparación

¡Vamos a ponernos manos a la obra con esta deliciosa tarta de manzana! Pero antes de empezar a mezclar ingredientes, hay algunas cosas que debemos hacer. En primer lugar, coge tu molde favorito para tartas y úntalo con un poco de mantequilla o spray desmoldante.

Después, espolvorea harina por encima y retira el exceso. ¡Listo! Ya tienes el molde preparado para acoger tu creación. Por cierto, yo siempre utilizo un molde desmontable, ¡así la tarta queda perfecta al desmoldarla!

Por otro lado, no podemos olvidarnos de precalentar el horno. Ponlo a 180°C (350°F) y déjalo que se vaya calentando mientras preparas la masa. Recuerda que un horno bien precalentado es la clave para una tarta perfectamente horneada. ¡Así que no te saltes este paso!

Elaboración de la base de masa

¡Vamos a preparar la base de masa para nuestra deliciosa tarta de manzana con leche y huevos! Empecemos tamizando la harina en un bol para conseguir una masa suave y fina, ¡justo como me enseñó mi abuela!

Luego, incorporaremos la mantequilla sin sal, previamente ablandada, y el azúcar. Mezclaremos bien todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.

Personalmente, me encanta utilizar mantequilla sin sal porque me permite controlar mejor el sabor de la masa. Pero si solo tienes mantequilla con sal a mano, no te preocupes, simplemente reducirás un poco la cantidad de sal que añadas más adelante.

A continuación, agregaremos el huevo y trabajaremos la masa hasta conseguir una textura uniforme. Una vez lista, extendemos la masa sobre nuestro molde favorito, previamente engrasado y enharinado, presionando con los dedos para cubrir la base y los laterales. Con la masa en su lugar, la reservamos en la nevera mientras preparamos el relleno de manzana.

Preparación del relleno de manzana: ¡El toque dulce y acogedor!

Este relleno de manzana es la estrella de nuestra tarta. Te contaré un secreto: ¡suelo preparar un poco extra para disfrutarlo como postre con un poco de helado de vainilla!

Para empezar, pelamos y cortamos las manzanas en trozos pequeños. Recuerda que cuanto más pequeños sean los trozos, más rápido se cocinarán y más fácil será disfrutar de su textura tierna en la tarta.

Una vez cortadas, las ponemos en un cazo a fuego medio y añadimos el azúcar, la canela y el zumo de limón. Me encanta la combinación de sabores que crean estos ingredientes. ¡El azúcar y la canela realzan el sabor natural de la manzana, mientras que el limón le da un toque de frescura!

Cocemos las manzanas durante unos 10-15 minutos, removiendo de vez en cuando para evitar que se peguen al fondo del cazo. Cuando estén tiernas y el jugo se haya espesado, ¡estarán listas para ser utilizadas en nuestra deliciosa tarta!

Preparación del relleno de leche y huevos: ¡La deliciosa crema que hará que tu tarta sea irresistible!

¡Es hora de preparar el relleno de leche y huevos para nuestra tarta de manzana! Este relleno es la clave para darle a tu tarta una textura suave y cremosa que se derrite en la boca. Personalmente, me encanta usar leche entera y huevos frescos para obtener la mejor consistencia y sabor.

Para empezar, bate los huevos en un bol grande. Luego, añade la leche, el azúcar y el extracto de vainilla. Mezcla todo bien hasta obtener una crema homogénea.

Una vez que tengas la mezcla lista, vierte el relleno de leche y huevos sobre la base de masa que preparaste anteriormente. Asegúrate de alisar la superficie para que quede lisa y uniforme.

¡TIP! Si quieres darle un toque extra a tu tarta, puedes espolvorear un poco de canela sobre el relleno antes de hornearla. También puedes sustituir el extracto de vainilla por ralladura de limón o naranja para darle un sabor cítrico.

Horneado y enfriado

¡Ya estamos en la recta final! Después de haber preparado la base de masa y el delicioso relleno de manzana, es hora de darle vida a nuestra tarta. Precalienta el horno a 180ºC y hornea la tarta durante 45-50 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y el relleno cuaje.

Recuerdo cuando horneé mi primera tarta de manzana con leche y huevos, ¡estaba tan emocionada! Pero también estaba un poco nerviosa, porque no quería que se me quemara o quedara cruda. Así que aquí tienes algunos consejos para que tu tarta salga perfecta:

• No abras el horno hasta que haya pasado al menos la mitad del tiempo de horneado. Esto evitará que la tarta se baje y se agriete.
• Si ves que la superficie de la tarta se está dorando demasiado rápido, cubrela con papel de aluminio para evitar que se queme.

Una vez horneada, deja enfriar la tarta en el molde durante 10-15 minutos. Luego, transfiere la tarta a una rejilla y deja que se enfríe por completo antes de servir. Si la tarta se enfría demasiado rápido, puede agrietarse, así que ten paciencia y deja que se enfríe a su propio ritmo.

¡Y recuerda, la mejor parte de hornear una tarta es disfrutarla con los que quieres!